Cascada de Maro

El pasado sábado 9 de Agosto, tres miembros del Club Espeleológico Salamandra y dos amigos mas (alguno posiblemente futuro miembro del club), tras visitar las cuevas de Igualeja y dirigirnos hacia Río Verde, decidimos hacer una paradita por el camino y visitar la preciosa Cascada de Maro. Con muy poca información sobre la misma, decidimos afrontar la actividad.

Una vez dimos con el cauce y llegamos a la cascada, procedimos a instalar el repartidor de carga

Terminada la triangulación, nos disponemos a descender la cascada.

Un regalo para la vista

 Durante la instalación, nos encontramos dos fraccionamientos. Posteriormente en una ficha técnica, descubrimos que en la derecha orográfica de la cascada existe otros dos anclajes para hacer un pasamanos. Si la cascada no va fuerte, podemos prescindir de los fraccionamientos. Nosotros montamos una vía fraccionada y otra directa al mar. Las panorámicas del momento eran increíbles

Para algunos de los integrantes, era la primera vez que rapelaban fuera de un entrenamiento. Por suerte, el mar estaba en calma y la actividad era bastante segura. Una gozada

Sixto haciéndose un selfie desde el primer fraccionamiento

Espectacular foto de Diego finalizando el primer tercio de la cascada

Casi de noche, Enrique disfrutando de su primer rápel en la naturaleza.

Casi caía la noche cuando Manuel y Carmen descendieron la cascada por lo que no inmortalizamos su momento. Una vez todos en el mar, inflamos unas almohadas de camping para cada uno y comenzamos a nadar los 400 metros que distaban hasta la orilla de la siguiente cala. Nuestro nado transcurría entre una tenue niebla iluminada por los blancos rallos de la luna llena que junto a la calma del mar nos producía sensación de bienestar. 

Cuando llegamos a la playa, nos encontramos con familias y grupos de amigos haciendo moragas, con sus toldos y espetos, ojalá nos hubieran ofrecido alguno :P. Luego, volvimos a la cabecera, recogimos las cuerdas y nos fuimos a Otivar con muy buen sabor de boca, pero la barriga vacía jijiji

Muy pronto, volveremos a la Cascada de Maro, esperemos pillarla con algo más de agua. 

De izquierda a derecha: Enrique, Carmen, Diego, Manolo y Sixto