12/10/13

Río Verde

El barranco de las chorreras. Ese precioso cañón que se encuentra en la localidad granadina de Otivar y por el cual, algunos Salamandras habíamos pagado anteriormente por hacer, otros ni siquiera habían ido, pero del que todos teníamos alguna referencia. Al principio del año, para algunos de nosotros era inpensable que fuésemos a instalar un barranco y mucho menos este que aunque no es complicado, dura unas 6 horas y eso es mucho tiempo para gente que aunque haya entrenado mucho, ha experimentado poco, al menos instalando.

El lunes 7 de octubre, siete personas fuimos a este barranco. Pudimos ser más, pero fuimos Arturo y Sonia, que tras una larga temporada de inactividad y recuperación vuelven fuerte y con ganas a la carga; Anselmo, natural de Sanlucar de Barrameda, que tras descender Zarzalones decide venir con su amigo a este río; Manuel el Buzo al que Carmen arrastra a este bello barranco y que ya había hecho antes; José, que sin haber traido Pedro Jimenez se enfrenta a este parque acuático por primera vez; Carmen, que tras haberlo hecho en varias ocasiones y haber entrenado mucho, se atreve esta vez a ir sin supervisión con su grupo y Sixto, que, después de haber entrenado mucho en la reja de su casa y haber dado mucho por... porque se iba al extranjero, decide que se va a meter en Río Verde.

Las noche antes del barranco, dormimos en el campo de un amigo de Arturo. A la mañana siguiente y tras hacer una combinación larguísima, comenzamos el barranco.


Algunos integrantes del grupo preparándose para entrar en el cauce


José evita el primer Rápel saltándolo


Sixto instalando uno de los rápeles


Anselmo con mucho estillo rapelando


Arturo después de algún tiempo, vuelve a los barrancos


En los cañones, todo no es rapelar


Aquí Arturo y Sonia disfrutando de un tranquilo baño en una poza


Sanlucar - Rota conexión


Carmen y José


¡Sonia, qué estilazo en la Y griega!


Anselmo no evitó el fuerte chorro


Manolo en la Y griega


Sixto, patrocinado por una marca de dentífrico, sonríe en la Y griega. Hay que decir que Carmen se metió en un agujero para echar fotos y que gracias a ella, todos tenemos inmortalizado este momento. 


Sixto saltando


Que el tiempo no nos separe :)


Carmen, qué sonrisa más bonita hija!


Sonia sigue rapelando con estilo ;)


Carmen y Sixto contemplando la cascada


Arturo saltando a la última poza


José pegando el salto la mata


Tras una larga Jornada en Río Verde, Anselmo nos saca esta foto de grupo. Tras andar unos 20 minutos hasta el vehículo y deshacer la combinación de coches, volvemos a nuestro pueblo muy cansados pero muy satisfecho por todo lo vivido y compartido, deseando repetir estas experiencias y descansando con una sonrisa en la boca. 

Gracias Salamandras

Por último, adjuntamos el video de Espeleo Salamandra en Río Verde. Pincha el enlace debajo de la imagen



24/9/13

Arroyo del Pajaruco

El pasado domingo 22 de septiembre algunos miembros del Club Espeleológico Salamandra decidimos visitar un barranco nuevo en Cádiz, recientemente instalado por el GIEX: El Pajaruco.

Situado en el término municipal Benaocaz, es un barranco de carácter estacional, seco en la época en la que fuimos pero que tiene bastante agua en invierno. Consta de 11 rápeles, 3 de ellos con pasamanos por lo que nos vino bastante bien para entrenar.

Una vez después de desayunar tostadas con tomate y un surtido de mantecas de la tierra en la plaza principal del pueblo, nos fuimos a la Posada el Parral y tomamos la vereda que parte justamente de atrás.


Tras el camino de acceso a la cabecera, nos preparamos para empezar el barranco.



Manuel se lanza a por el primer rápel



Nuestro amigo el avispón


Este puente de roca nos sirve para hacer un pasamanos



Sixto se acercó a la cabecera instalando un pasamanos mediante la maniobra de autodescuelgue




Al haber varias cabeceras, podíamos entrenar de diferentes formas



Rana haciendo el loco


Manuel en el volao


Hubo quien también hizo la loca y luego salió formalita en la foto






Que arte Manolo!


Después de un día genial de entrenamiento, nos asomamos a algunas bocas de nuestra sierra y nos fuimos a darnos un chapuzón a Bocaleones. Este barranco tiene que ser muy divertido en temporada de lluvia así que pronto volveremos a realizarlo con mucha agua.

De derecha a izquierda: Manuel, Carmen, Sixto y Manolo Rana


Ascenso al Mulhacén

El pasado fin de semana del 6, 7 y 8 de Septiembre, tres salamandras y otro amigo más nos dispusimos a subir el techo de la península: el Mulhacén (3478 metros) desde Güejar Sierra (1000 metros).

Partimos hacia Güejar Sierra a las 12 de la mañana y entre una cosa y otra, hasta las 5 y media de la tarde no nos ponemos en marcha. El grupo estaba integrado por José, Manolo, Anselmo y Sixto.


Los atrevidos. De derecha a izquierda: Anselmo, José, Manolo y Sixto



Comenzamos tomando la Vereda de la Estrella. Mas de uno no era consciente de lo que le esperaba =)




Mina de la Probadora 


A la izquierda, la Alcazaba y a la derecha al fondo, el Mulhacén. 


Esta pequeña víbora no la cogimos con las manos por si acaso...


Rana buscando el primer vivac


Ya en Cueva secreta, comenzamos a cenar y nos relajamos... hubo hasta quien se trajo su pijama para sentirse como en casa


Nuestra cama. Faltaba la mula y el buey


Segundo día: La lluvia nos acompañó desde por la mañana hasta pasado el medio día. El Goretex dijo que él también tenía un límite.





En las chorreras de la mosca, el fortísimo desnivel junto con la ropa calada hacía nuestra progresión bastante penosa. 


Hubo algunos campeones que derrocharon energía


Cuando llegamos al collado del Ciervo (3120 metros) dejó de llover, a cambio de una densa niebla que nos impedía ver con claridad y un fuerte viento helado. Tomamos la decisión de no hacer cumbre e irnos a descansar al refugio de la Caldera. 




Bocadillos, frutos secos, Moscatel de pasas de Chipiona... ¡Todo un lujo!


A la mañana siguiente, nos disponemos a bajar


La niebla nos da un poco de tregua y nos permite ver la cima del Mulhacén.


La cara norte del Mulhacén desde el Collado del Ciervo


La Laguna de la Mosca




Bajando por las chorreras



El cansancio ya se notaba


Las rodillas ya no podían más. Bajando por Valdecasillas 


Tras un descanso en este puente del Río Valdeinfierno, retornamos por la vereda de la Estrella hasta llegar al coche. No conseguimos hacer cumbre, pero vivimos una experiencia única, enfrentándonos a la montaña y disfrutando de sus paisajes y su naturaleza. ¡Volveremos para hacer cumbre con mejores condiciones climatológicas!